Concejos para ser más proactivo.
Tener una vida saludable nos ayuda a ser más proactivos.

Es un hecho que la pandemia de COVID-19 y su respectiva cuarentena nos ha dejado como consecuencia un alto índice de procrastinación: el hecho de dejar para más adelante lo que debemos afrontar hoy, ya sea por miedo o pereza.

Lo importante es saber identificar esos patrones que modifican nuestra rutina y que hacen que cada vez sea más difícil o pesado retomar y llevar a cabo nuestras responsabilidades cotidianas íntegramente.

Y no se trata de un hecho aislado, ya que como sabemos, somos una especie que se rige por costumbres… costumbres que con el tiempo se vuelven hábitos difíciles de erradicar.

Por esta razón, en este artículo te enseñaremos algunos consejos, que te ayudarán a salir de esta situación y dejar atrás el sentimiento de estar atascado.

Acostarse temprano

Los seres humanos como también los animales, las plantas y todos los organismos vivos muestran algún tipo de variación rítmica fisiológica, asociado a que vivimos en un ambiente constantemente cambiante: los llamados ciclos circadianos, que sincronizan nuestros relojes internos, tanto el central (cerebro) como los periféricos (órganos internos). Estos cambios fisiológicos se rigen mediante los siguientes factores: la luz solar, la temperatura ambiental, la alimentación y el movimiento, a lo largo de un día.

Una buena técnica para poner en práctica sería levantarse con el amanecer y estar listos para ir a dormir una vez que anochece. Esto ayuda a que nuestro cuerpo descanse profundamente las horas suficientes y de esta manera estar más predispuestos a madrugar al día siguiente sin que esto resulte tedioso. Aprovechar al máximo las horas de luz harán que tu día sea más productivo.

Realizar ejercicio físico regularmente

Aquí no hablaremos de ser campeones de peso pesado o matarnos en el gimnasio durante horas. Pero todos coincidimos en que una vida sedentaria no es saludable, y que es importante ofrecerle al cuerpo la posibilidad de movilidad. Por lo que una caminata diaria de 40 minutos es suficiente para mantener los músculos en movimiento y evitar que se atrofien. Después de todo, los seres humanos estamos diseñados para caminar por largos períodos de tiempo, como está demostrado que lo venimos haciendo a lo largo de la historia. Además la oxigenación del cerebro al respirar aire puro fomenta la creatividad y claridad mental para generar nuevas ideas. Así que siempre es una buena ocasión para alistar tus tenis y salir a dar un paseo.

Alimentacion balanceada

Muchas veces nos cuesta mucho trabajo poner manos a la obra y preparar nuestro propio menú; a veces porque no tenemos el tiempo necesario o simplemente nos sentimos desganados y creemos que acceder a una comida rápida es la mejor opción. Pero, poco a poco te darás cuenta que este tipo de alimentación no te aporta la energía suficiente para mantenerte activo y saludable.

Una alimentación rica en proteínas, fibras, carbohidratos y grasas saludables nos aportará los nutrientes necesarios para encarar un nuevo día de la manera más productiva, evitando la aparición de enfermedades a largo plazo. Mantener una buena salud es una forma rentable de cuidar el bolsillo, después de todo enfermar es muy caro.

Recuerda el viejo refrán: somos lo que comemos.

Uso de agenda

En este punto vamos a tratar la importancia de organizar los tiempos: programar semanalmente las actividades relevantes con anticipación, para así saber que les apartamos y dedicamos el tiempo suficiente para su realización. Se trata de armar estructuras que nos facilitaran completar los planes con éxito y motivación, y de esta manera nos aseguramos de no fallar en su realización responsablemente.

La agenda es una excelente herramienta que si se la utiliza correctamente nos ayuda a acercarnos más a nuestros grandes objetivos. Y que al finalizar nuestro día estemos mejor que al principio del día. Prueba con esta técnica y lograrás cambiar los hábitos de tu rutina.

Ocio vs formación profesional.

Está muy bien dedicar parte de nuestro tiempo al entretenimiento y al ocio: despejar un poco la mente de tanto trabajo. El problema se presenta cuando no somos capaces de distinguir cuándo es el momento de ponerle un freno, y siempre terminamos cediendo un poco más de tiempo de lo que necesitamos realmente.

Si dedicamos parte de ese tiempo de ocio a consumir material enriquecedor que nos aporta un conocimiento extra, nos ayuda a aumentar nuestro coeficiente intelectual y así contar con más recursos y herramienta para afrontar nuevos desafíos y metas, como aprender un nuevo idioma o cualquier tipo de capacitación académica.

Hoy en día contamos con Internet como gran fuente de información al alcance de la mano; solo se necesita poner nuestra voluntad e interés en querer saber cada día un poco más de lo que ya sabemos. Las posibilidades son infinitas.

 «Decidir qué no hacer es tan importante como decidir qué hacer. El mundo está en tus manos.»

Steve Jobs

Amigos, estos son algunos consejos que si los ponemos en práctica no tardaremos en ver los resultados favorables en nuestro día a día. Cómo todo, lleva un tiempo en acostumbrarnos a nuevos hábitos hasta que finalmente se conviertan en parte de nuestra rutina diaria. Comenten abajo qué otros consejos conocen que nos ayudan a ser más proactivos y dejar de procrastinar en estos tiempos que corren. Hasta el próximo artículo!